Buscar este blog

Entradas populares

sábado, 17 de diciembre de 2011

Soplidos en la noche.

Me acaban de dar el soplo, quiero decir la barrila soplando, un Guardia Civil de Tráfico, a mi, que soy el rey de los abstemios, soplé, vaya si soplé un poco "desairado" por aquello de que la duda ofende, pues presumir de mi ni de lejos una connivencia con el alcohol es como para ofenderse, mis vicios son más entrañables nada desdeñables y de todo punto inconfesables.

Muy educado el agente, verde que te quiero verde, boquilla en ristre, me invitó a soplar, tengo para mi que no reparó en un dato que de por si, invitaría a la reflexión sobre mis capacidades para la conducción. 
De entrada no había manera de sacar el plástico protector ni abocados, que se los di conste, y una vez alcanzada tal proeza entre mis torpes manos agarré la boquilla y a soplar que uno no es de Bilbao pero si Gallego, eso si, tan sobrado iba que se me olvidó meter la boquilla en el etilómetro que el Guardia me ofrecía, mirándome entre sorprendido y con cara de cachondeo, mientras yo me preguntaba qué estaré haciendo mal..
El caso es que dijo-tiene que meter la boquilla en el alcoholímetro- por lo bajine  dije, pues ya podrías hacerlo tú que yo iba para mi casita tan ricamente y eres tú el que perturbas mi paz del camino, claro que quien era el chulo que se lo decía, ah pero me vengué, con un cero, coma, otro tanto por litro...Condescendiente como queriendo decir por esta vez te has salvado, tuvo un detalle conmigo, y me regaló "la boquilla" a guisa de recuerdo de esta noche; pienso enmarcarla, ahora eso si, ni se percató de que iba tan cansado que no me enteraba que estaba meando fuera del tiesto, soplando quiero decir o sea  no muy hábil de reflejos; re-emprendí la marcha y con ánimo vengativo, tararee.. "el vino que tiene asunción no es blanco ni tinto ni tiene color".

Y es que al parecer es condición necesaria que la boquillita de marras esté enchufada al medidor, detalle que uno que va como un verso suelto por la vida, no había apreciado.